Si bien algunos criterios se refieren al adulto mayor como una persona que tiene 60 años o más, otros consideran que esta etapa comienza a partir de los 65 años. Diferenciar entre uno u otro criterio es poco importante a la hora de hacer algunas observaciones.
Primero, es esencial comprender que el envejecimiento presenta en los individuos alteraciones naturales que es necesario conocer, para diferenciarlas de aquellas que se producen en forma patológica. La adecuada nutrición juega un rol fundamental.
Entonces... ¿El adulto mayor debe tener una dieta especial?
No especial, sino más bien equilibrada. Lo ideal es promover el consumo de verduras y frutas (como mínimo 3 a 4 porciones de verduras crudas y 2 a 3 frutas crudas diariamente), por su alto contenido de antioxidantes, minerales y vitaminas que protegen su salud. Además porque contienen fibra, sustancia que favorece la digestión, reduce el colesterol y ayuda a mantener balanceado el azúcar en la sangre.
Es necesario enfatizar en la reducción del consumo de sal para evitar o agravar problemas de hipertensión y moderar la ingesta de azúcar.
En el caso de personas que sufren de alguna crónica como Diabetes, Hipertensión, Asma, etc., la dieta alimenticia debe ser determinada siempre por su médico tratante.
y... ¿Cuánto debe comer al día?
Si bien cada individuo tiene una necesidad calórica de acuerdo a sus características particulares, hay que recordar que al disminuir la actividad física disminuyen también los requerimientos energéticos (calorías). Además, se produce una pérdida de masa muscular, en concomitancia, con un aumento del porcentaje de la grasa corporal. Por tanto, se debe adecuar los alimentos a la actividad física realizada.
¿Qué pasa en general con los medicamentos en el Adulto Mayor?
Este es un tema muy importante. La medicación de terceros o automedicación queda absolutamente descartada. En esta etapa de la vida se producen importantes cambios a nivel del hígado y riñones, los cuales modifican de manera sustancial la forma en que los medicamentos ejercen su efecto global en el organismo.
Por otra parte, el aumento de la grasa corporal, hace que algunos fármacos muy afines a ella, tiendan a permanecer mayor tiempo en el organismo, con lo cual se hace necesario realizar ajustes de dosificación.
Y si el médico ha prescrito muchos medicamentos. ¿Qué se debe hacer?
Cuando se hace inevitable la administración de muchos medicamentos o lo que los químicos farmacéuticos llamamos polifarmacia, lo ideal dejar claramente con el médico las dosificaciones, horarios y almacenamiento de sus medicamentos. También puede recurrir al “Programa de Atención Farmacéutica” de Farmacias Ahumada. Este consiste en un seguimiento que los profesionales químicos farmacéuticos hacen acerca de la terapia que cada paciente recibe en forma individual. A través de la supervisión médica y la Atención Farmacéutica, es posible optimizar la terapia con medicamentos (establecer dosis, horarios, etc.) y detectar efectos adversos u otros problemas relacionados con medicamentos, que ésta pudiese causar.
Otras recomendaciones para una adecuada terapia farmacológica:
- Es muy común que los adultos mayores, al perder cierta capacidad visual, tiendan a confundir los medicamentos que están utilizando; con lo cual muchas veces repiten administraciones de un mismo medicamento indebidamente. Lo recomendable es que, siempre se marquen las cajas con el horario en que el medicamento debe ser administrado la función que este cumple; ojalá con letras y números lo suficientemente grandes y distintivos como para no caer en el error.
- Eliminar sin dudarlo, aquellos medicamentos vencidos.
- Es fundamental que el adulto mayor no omita o aplique dosis de medicamento extras por su cuenta.
- Muchas terapias de enfermedades crónicas requieren un tiempo de evaluación para elegir la dosis adecuada, de este modo se hace imprescindible que el paciente anote lo que le va sucediendo durante el tratamiento idealmente con fecha y hora. Esto facilitará la tarea de establecer la dosis adecuada.
- El cumplimiento de la terapia es fundamental para obtener una mejor calidad de vida. En el caso de padecer enfermedades crónicas como la Hipertensión, Diabetes, asma, Dislipidemia, etc. el paciente debe ser estrictamente riguroso en la ingesta de sus medicamentos y debe realizarse chequeos médicos por lo menos cada seis meses.
Depende del caso. Las vitaminas cumplen funciones reguladoras y no energéticas. Lo que verdaderamente sucede, es que cuando existen enfermedades que implican desnutrición o simplemente se aplican dietas desequilibradas, los polivitamínicos ayudan a reestablecer los niveles fisiológicos normales de ellas; por consiguiente, el organismo funciona en armonía y se produce una sensación de bienestar. Sin embargo, este tipo de productos deben ser indicados por el médico luego de una evaluación y determinación de la necesidad de éste.
¿El Calcio, se debe o no consumir?
El calcio es un elemento mineral asociado al fortalecimiento de los huesos. A medida que se avanza en edad, se va disminuyendo la capacidad de fijar calcio a los mismos y estos comienzan a debilitarse. De aquí entonces, la necesidad de administrar suplementos o medicamentos que contengan calcio, para intentar postergar ese debilitamiento la mayor cantidad de tiempo posible.
Los alimentos ricos en calcio son: los lácteos, pescados y hortalizas (Repollo, espinacas, acelgas, etc.)
Al igual que los multivitamínicos, la necesidad del organismo del suplemento calcio debe determinarla su médico tratante
Y por último, el adulto mayor ¿Puede hacer ejercicios?
- Por supuesto, evidentemente que dependiendo de la condición de cada cual, unos podrán realizar ciertos ejercicios y otros no.
- De manera global, es importante mencionar que diversas investigaciones han demostrado que la práctica física regular incrementa la habilidad de un adulto mayor en sus quehaceres diarios, reduce los riesgos de enfermedades crónicas específicas, incluyendo las enfermedades coronarias y baja la tasa de mortalidad.
- Dentro de los beneficios del ejercicio se pueden ver principalmente en:
- El sistema cardiovascular (modulador de la variabilidad de la frecuencia cardiaca con ejercicio aeróbico)
- El sistema respiratorio
- El sistema inmunológico.
- El ejercicio debe ser siempre autorizado por un médico.
- La práctica de ejercicio no sólo mejora las condiciones físicas, sino que además ayuda a eliminar tensiones, estrés y recrea la mente. Esto en conjunto, contribuye a mejorar la percepción de mismo y a vivir en armonía.
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