Todos los alimentos que consumimos contienen nutrientes o nutrimentos, en mayor o menor cantidad. Cada uno de ellos cumplen funciones específicas en el metabolismo del cuerpo que nos ayudan a mantenernos sanos.
En el área de nutrición, reconocemos dos grupos de nutrimentos de acuerdo a la cantidad en que se requieren. No tiene nada que ver con su importancia, puesto que todos son indispensables para un funcionamiento óptimo del cuerpo. Los distinguimos en Macronutriementos y micronutrimentos.Los macronutrimentos, componen el 99 % de los alimentos que consumimos y nos aportan energía. Consideramos dentro de estos a los Carbohidratos o azúcares, las proteínas y las grasas también llamadas lípidos. Los micronutrimentos, son sustancias nutritivas que el cuerpo necesita en pequeñas cantidades (menos del 1 %) y sirven para protegernos de algunas enfermedades. Estos, al igual que los macronutrimentos, los encontramos en los alimentos que consumimos diariamente.
Los micronutrimentos, también son conocidos como vitaminas y minerales; Entre los más comunes, encontramos la Vitamina A, la serie de vitaminas B, la vitamina C, el ácido fólico, y los minerales hierro, yodo, calcio y zinc.
Cuando consumimos diariamente una dieta variada y preparada con diversos alimentos, nos aseguramos de consumir los micronutrimentos suficientes y otras sustancias nutritivas necesarias para vivir sanos.
En todas las etapas de la vida son importantes, sin embargo los niños, los adolescentes y los adultos mayores, necesitan poner especial interés en llevar una dieta adecuada, ya que esto ayudará a que no sufran deficiencias de nutrimentos como la Vitamina A, C, Calcio, hierro, ácido fólico y Zinc.
A continuación te desglosamos a grandes rasgos algunas cosas importantes que debes saber.
Vitamina A: Se encuentra en la leche, el queso, las verduras y frutas de color verde, amarillo y naranja. Previene problemas de la vista, diarreas, infecciones de la piel y retardo del crecimiento y desarrollo.
Complejo B: Aquí se incluyen las vitaminas B1, B2, B6 y B12. Las verduras de hojas verdes, los frijoles, los cereales integrales, el huevo y las carnes son fuente de estas vitaminas, así como la levadura de cerveza que es una excelente fuente de vitamina B12.
Vitamina C: La mayoría de las frutas cítricas como la naranja, limón, toronja, guayaba, los vegetales verdes, el jitomate, y especialmente la guayaba y el chile, son fuente importante de esta vitamina. Favorece un mejor aprovechamiento del hierro y previene enfermedades respiratorias, sagrado de encías y problemas de cicatrización.
Ácido fólico: Se encuentra presente en todas las verduras de color verde obscuro (quelites, acelgas, espinacas), frijoles, habas, así como en carnes. Esta vitamina disminuye las enfermedades diarreicas, anemia en mujeres embarazadas y en niñas y niños menores de 5 años.
Hierro: Las verduras de hojas verdes, los frijoles y las lentejas son fuente importante de este mineral, sin embargo siempre deben ir acompañadas de una pequeña dosis de vitamina C para mejorar su absorción. No dudes añadir un poco de limón o algún otro alimento rico en vitamina C para que sea más nutritivo. Evita la anemia, principalmente en niños y niñas menores de 5 años, así como mujeres en edad fértil.
Yodo: Presente en el pescado y en la sal yodada. Previene el bocio (abultamiento en el cuello) y problemas de crecimiento y desarrollo en niñas y niños. Calcio: Se encuentra en la tortilla de maíz, el amaranto, los vegetales verdes y especialmente en el ajonjolí. También en los productos lácteos. Protege contra la osteoporosis, el raquitismo y la debilidad de huesos y dientes.
Zinc: El pescado, los cereales integrales y los vegetales de hojas verdes con fuentes importantes de este nutrimento. Su deficiencia afecta principalmente a adolescentes, adultos, mujeres embarazadas y madres que amamantan. Puede provocar retraso de crecimiento y envejecimiento prematuro.
Recomendaciones
La alimentación recomendable debe aportar, además de la energía que se necesitan para vivir y/o crecer, las vitaminas y minerales necesarios para estar sanos. Las vitaminas A, B, C, el ácido fólico y los minerales como el hierro, el calcio y el yodo son básicos para una nutrición adecuada.Las mujeres embarazadas y las que amamantan, deben comer diariamente alimentos ricos en vitaminas, proteínas y minerales para no sufrir anemia, descalcificación, desnutrición y para evitar tener niños desnutridos.
En los adultos y ancianos es muy importante que la dieta diaria sea variada así como incluir frecuentemente frutas y verduras.
Todos los alimentos que consumimos contienen nutrientes o nutrimentos, en mayor o menor cantidad. Cada uno de ellos cumplen funciones específicas en el metabolismo del cuerpo que nos ayudan a mantenernos sanos.
En el área de nutrición, reconocemos dos grupos de nutrimentos de acuerdo a la cantidad en que se requieren. No tiene nada que ver con su importancia, puesto que todos son indispensables para un funcionamiento óptimo del cuerpo. Los distinguimos en Macronutriementos y micronutrimentos.
Los macronutrimentos, componen el 99 % de los alimentos que consumimos y nos aportan energía. Consideramos dentro de estos a los Carbohidratos o azúcares, las proteínas y las grasas también llamadas lípidos. Los micronutrimentos, son sustancias nutritivas que el cuerpo necesita en pequeñas cantidades (menos del 1 %) y sirven para protegernos de algunas enfermedades. Estos, al igual que los macronutrimentos, los encontramos en los alimentos que consumimos diariamente.
Los micronutrimentos, también son conocidos como vitaminas y minerales; Entre los más comunes, encontramos la Vitamina A, la serie de vitaminas B, la vitamina C, el ácido fólico, y los minerales hierro, yodo, calcio y zinc.
Cuando consumimos diariamente una dieta variada y preparada con diversos alimentos, nos aseguramos de consumir los micronutrimentos suficientes y otras sustancias nutritivas necesarias para vivir sanos.
En todas las etapas de la vida son importantes, sin embargo los niños, los adolescentes y los adultos mayores, necesitan poner especial interés en llevar una dieta adecuada, ya que esto ayudará a que no sufran deficiencias de nutrimentos como la Vitamina A, C, Calcio, hierro, ácido fólico y Zinc.
A continuación te desglosamos a grandes rasgos algunas cosas importantes que debes saber.
Vitamina A: Se encuentra en la leche, el queso, las verduras y frutas de color verde, amarillo y naranja. Previene problemas de la vista, diarreas, infecciones de la piel y retardo del crecimiento y desarrollo.
Complejo B: Aquí se incluyen las vitaminas B1, B2, B6 y B12. Las verduras de hojas verdes, los frijoles, los cereales integrales, el huevo y las carnes son fuente de estas vitaminas, así como la levadura de cerveza que es una excelente fuente de vitamina B12.
Vitamina C: La mayoría de las frutas cítricas como la naranja, limón, toronja, guayaba, los vegetales verdes, el jitomate, y especialmente la guayaba y el chile, son fuente importante de esta vitamina. Favorece un mejor aprovechamiento del hierro y previene enfermedades respiratorias, sagrado de encías y problemas de cicatrización.
Ácido fólico: Se encuentra presente en todas las verduras de color verde obscuro (quelites, acelgas, espinacas), frijoles, habas, así como en carnes. Esta vitamina disminuye las enfermedades diarreicas, anemia en mujeres embarazadas y en niñas y niños menores de 5 años.
Hierro: Las verduras de hojas verdes, los frijoles y las lentejas son fuente importante de este mineral, sin embargo siempre deben ir acompañadas de una pequeña dosis de vitamina C para mejorar su absorción. No dudes añadir un poco de limón o algún otro alimento rico en vitamina C para que sea más nutritivo. Evita la anemia, principalmente en niños y niñas menores de 5 años, así como mujeres en edad fértil.
Yodo: Presente en el pescado y en la sal yodada. Previene el bocio (abultamiento en el cuello) y problemas de crecimiento y desarrollo en niñas y niños. Calcio: Se encuentra en la tortilla de maíz, el amaranto, los vegetales verdes y especialmente en el ajonjolí. También en los productos lácteos. Protege contra la osteoporosis, el raquitismo y la debilidad de huesos y dientes.
Zinc: El pescado, los cereales integrales y los vegetales de hojas verdes con fuentes importantes de este nutrimento. Su deficiencia afecta principalmente a adolescentes, adultos, mujeres embarazadas y madres que amamantan. Puede provocar retraso de crecimiento y envejecimiento prematuro.
Recomendaciones
La alimentación recomendable debe aportar, además de la energía que se necesitan para vivir y/o crecer, las vitaminas y minerales necesarios para estar sanos. Las vitaminas A, B, C, el ácido fólico y los minerales como el hierro, el calcio y el yodo son básicos para una nutrición adecuada.
Las mujeres embarazadas y las que amamantan, deben comer diariamente alimentos ricos en vitaminas, proteínas y minerales para no sufrir anemia, descalcificación, desnutrición y para evitar tener niños desnutridos.
En los adultos y ancianos es muy importante que la dieta diaria sea variada así como incluir frecuentemente frutas y verduras.
1 comentario:
Yo tengo mi papá ya mayor y precisamente en esta semana he empezado a buscar diferente información al respecto, de hecho, fue así como llegué al Club Sentirse Bien de Nestlé Perú y encontré esta nota: “Alimentación en el adulto mayor” http://ww1.nestle.com.pe/clubsentirsebien/ComunidadNestle/Mayores/nutricion/28/alimentacion-en-el-adulto.aspx Es muy interesante... además, también podrán ver otros temas referidos a la Salud y Bienestar… ¡Saludos!
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