viernes, 4 de noviembre de 2011

EL AMOR ES LO MAS PURO

El Amor es la única fuerza del Universo y es el nivel vibratorio más alto que podemos alcanzar. Gracias al amor nos movemos, nos relacionamos, nos sanamos y nos expandimos.
Nosotros creemos que existen diferentes clases de amor; por ejemplo: el amor que una madre siente por sus hijos, el amor entre amantes, el amor de amigos.
Sin embargo, debes saber que existe una sola clase de amor: el de Dios.
El Amor de Dios es incondicional, sin divisiones, ni clasificaciones; es permanente y estable.
Creemos que amamos a alguien porque nos brindamos a esa persona pero, a la vez, le exigimos que haga lo mismo hacia nosotros.
El Verdadero Amor es incondicional. Al Verdadero Amor sólo le interesa darse y expandirse; no necesita nada a cambio.
El Amor es la fuerza mas poderosa del universo y lo puede todo, lo sana todo, lo arregla todo, con amor damos, vivimos, procreamos, ayudamos, recibimos y sin el no podríamos desarrollarnos , crecer, ni vivir en comunidad, el amor es el sentimiento que posee el mayor poder vibratorio de todos
Esta basado en el amor a uno mismo , al mejoramiento de nosotros como seres humanos individuales y que ese crecimiento en el amor nos empuje a ayudar a quienes nos rodean, con amor podemos lograrlo todo, podemos encontrar la plena felicidad.
Tu corazón es un instrumento musical, contiene una música grandiosa. Dormida, pero está allí, esperando el momento apropiado para ser interpretada, expresada, cantada, danzada.

Y es a través del amor que el momento llega, si no tienes amor nunca conocerás qué música ha estado llevando dentro de su corazón.

Es sólo a través del amor que la música comienza a tomar vida, se despierta y deja de ser un potencial para convertirse en realidad.

El Amor es una profunda necesidad de ser uno con el todo, una profunda necesidad de disolver en una unidad el tú y el yo.

Estas líneas confirman que estás acompañado. A los ojos de muchos, seremos ilusos o simples soñadores que pretendemos crear un mundo que nunca será.

El amor es así porque estamos separados de nuestra propia fuente.

De esa separación surge el deseo de volver a Dios y de unificarse con El.

No importa. Nuestra voz interior nos orienta y anima a persistir.

Quien mire tus ojos vea el brillo de un nuevo amanecer.

Que quien tome tus manos sienta contención y humanidad.

Que tus palabras se transformen en agua fresca para aquellos que estén sedientos de consuelo y esperanza.

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