miércoles, 4 de noviembre de 2009

SOBREPESO OBESIDAD

En la población asentada en el Estado de México existen otras clases de padecimientos, no sólo la influenza tipo AH1N1 ha dejado su huella. Tal es el caso de la diabetes mellitus y la obesidad entre otros padecimientos.

De esta última no es sencillo definir sus causas. La transición de un peso normal al sobrepeso y la obesidad y de ésta a la obesidad mórbida, generalmente implica una ingesta de calorías en los alimentos mayor que la velocidad con la que esa persona quema todas esas calorías. Existen razones distintas para este desequilibrio de calorías que ingresan y las que se queman y están involucrados muchos factores.

Las causas de la obesidad pueden incluir la composición genética, el metabolismo, la cultura, el entorno, el nivel socioeconómico y la conducta de una persona. A menudo el riesgo de una persona para desarrollar obesidad mórbida está sumamente influenciado por factores psicológicos. El aburrimiento, la depresión, la ansiedad, el estrés, los traumas (ya sea de adulto o niño) y los sentimientos de baja autoestima son ejemplos de factores psicológicos que podrían hacer que una persona coma en exceso o no se ejercite lo suficiente. Aunque el aspecto psicológico de la obesidad mórbida puede ser difícil de superar, no es imposible. La simple identificación de los problemas psicológicos puede ayudar en gran medida a una persona a comprender las bases de la ingesta en exceso.

Las enfermedades también pueden llevar a la obesidad mórbida. Algunas de éstas son hipotiroidismo, Síndrome de Cushing, depresión y otros problemas neurológicos. El uso de esteroides y ciertos antidepresivos también pueden resultar en un aumento de peso.

De acuerdo a datos obtenidos por el ISEM las principales causas de muerte en el Estado de México son la cirrosis y otras enfermedades crónicas del hígado, diabetes mellitus, enfermedades isquémicas del corazón, enfermedades cerebrovasculares, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, enfermedades respiratorias bajas, asfixia y trauma al nacimiento, enfermedades hipertensivas, desnutrición calórica proteica, nefritis y nefrosis, accidentes de vehículo de motor (tránsito), malformaciones congénitas del corazón, uso del alcohol, agresiones (homicidios), úlcera péptica, enfermedades infecciosas intestinales, caídas accidentales, ahogamiento y sumersión accidentales, tumor maligno de la próstata y leucemia.

Las estadísticas del ISEM señalan que los municipios con mayor índice de defunciones son Ecatepec de Morelos, con 6 mil 601 registradas cada año; Nezahualcóyotl, con 5 mil 885; Naucalpan de Juárez, con 3 mil 897; Tlalnepantla de Baz, con 3 mil 613; Chimalhuacán con mil 801; en Atizapán de Zaragoza se registran mil 717; Cuautitlán Izcalli, con mil 600 defunciones; Nicolás Romero, con mil 138 personas e Ixtapaluca, que registra mil 89 defunciones. Los anteriores municipios se registran hasta el año 2006 como aquellos en los que mayor número de decesos se presentan. En contraparte, los municipios con menor índice de mortandad son Tonanitla con 13; Zacazonapan, con 15; Ayapango, con 28; Ixtapan del Oro, con 33 personas; Temamatla con 34; Isidro Fabela con 41; Mexicaltzingo con 67 y Tonatico con 80 personas.

Problemas de la obesidad y riesgos para la salud

La obesidad es la segunda causa principal de muerte en los Estados Unidos. Se encuentra asociada con un mayor riesgo de desarrollo o agravamiento de más de 30 enfermedades o afecciones graves. La obesidad reduce la movilidad de una persona, esto dificulta la actividad física, por lo que se empeora el problema y aumenta aún más el riesgo de que se desarrollen o agraven algunas de estas afecciones. A continuación se presenta una lista abreviada de las enfermedades afectadas por la obesidad:

Enfermedad cardíaca coronaria.

Accidente cerebrovascular.

Hipertensión arterial alta.

Enfermedad hepática grasa.

Osteoartritis.

Gota, enfermedad que afecta las articulaciones.

Diabetes.

Enfermedad de la vesícula biliar.

Problemas respiratorios, incluida la apnea del sueño.

Cáncer.

Trastornos reproductivos y ginecológicos en las mujeres.

Los problemas asociados con la obesidad pueden afectar a adultos, adolescentes y niños. Existen diferencias relacionadas con el sexo y la edad en los tipos y la incidencia de los problemas asociados con la obesidad, pero todas las personas que padecen obesidad mórbida tienen el mismo problema: determinar la mejor manera de alcanzar en forma segura el peso normal.

Diabetes mellitus

La diabetes es, a partir del año 2002, la primera causa de mortalidad general; en el año 2003 se registraron 7 mil 864 muertes con una tasa de 56.54 por 100 mil habitantes y un incremento de 516 muertes con respecto al 2002. En el año 2004 se presentaron 8 mil 292 muertes con tasa de 58.5 por 100 mil habitantes, incrementándose en 428 muertes en relación al 2003. La diabetes es el problema de salud pública más grave de México, ya que afecta aproximadamente a seis millones de personas; mientras que en el mundo se calcula que en el año 2025 habrá 300 millones de enfermos, de los cuales 75 por ciento habitará en países pobres, aseveró José Narro, de la facultad de Medicina (FM) de la UNAM. La prevalencia más alta se da en el grupo de edad de 60 a 69 años. Así, uno de cada cuatro mexicanos en este rango sufre este trastorno.

En ese conjunto se contabilizan alrededor de un millón 200 mil personas afectadas.

Por otro lado, dijo, prácticamente la mitad de los diabéticos menores de 40 años -este padecimiento aparece cada vez a edades más tempranas- no lo saben.

Entre las causas por las que ha aumentado su número en el país sobresale el incremento de esperanza de vida, obesidad, vida sedentaria, cambios en la alimentación, ensanchamiento de la población urbana, así como el nacimiento de niños de bajo peso que en la vida adulta desarrollan este mal.

Uno de cada cuatro diabéticos tienen complicaciones graves, algunas son fatales y relativamente de instalación progresiva, silenciosa, paulatina y amenazantes. Así, 14 por ciento presenta neuropatía diabética, 8 pie diabético y 3 por ciento ceguera.

En el siglo XX se vio una expansión desmedida en México y en el mundo de esta enfermedad -se calcula que su prevalencia global es de 4.6 por ciento- lo que ha llevado a configurar una Federación Internacional de Diabetes, con organizaciones nacionales en 134 países.

La diabetes mellitas es un trastorno conocido hace más de 2 mil 500 años, el cual es crónico, progresivo, de comportamiento epidémico, que en su etiología tiene una carga genética, en donde influyen de manera especial los factores de la vida.

Al ofrecer datos epidemiológicos de la diabetes mellitus tipo 2, agregó que de no encontrarse la cura de este mal, las naciones en vías de desarrollo -entre ellas México- deberán atender en su conjunto a cerca de 225 millones de personas.

Un factor de riesgo para el desarrollo de la diabetes mellitus es la obesidad, que en el Estado de México la padece el 23.3 por ciento de la población. Además de estar vinculada con la diabetes mellitus, también es un factor que promueve la prevalencia y desarrollo de la hipertensión.

Hipertensión arterial

La hipertensión arterial es un padecimiento crónico de etiología variada y que se caracteriza por el aumento sostenido de la presión arterial, ya sea sistólica, diastólica o de ambas. En el 90% de los casos la causa es desconocida, por lo cual se le ha denominado hipertensión arterial esencial, con una fuerte influencia hereditaria. En 5 a 10% de los casos existe una causa directamente responsable de la elevación de las cifras tensionales y a esta forma de hipertensión se le denomina hipertensión arterial secundaria.

El cáncer en la población femenina es una de las principales causas de muerte en las mujeres mexicanas. El cáncer de mama se sitúa en el primer lugar de muertes en mujeres de 25 años y más, el cáncer cérvico uterino ocupa el primer lugar de muerte por neoplasias malignas en las mujeres de 25 a 64 años de edad, es el que más estragos ha hecho en las damas de este país, aseguró la doctora Elizabeth Dávila Chávez, Subdirectora de Prevención y Control de Enfermedades del Instituto de Salud del Estado de México.

Abundó que esta neoplasia es una enfermedad que no manifiesta ningún síntoma cuando comienza, se presenta en mujeres relativamente jóvenes, en plena actividad económica, muchas de ellas son el sostén único de sus casas, quienes tienen la responsabilidad de sus hijos en cuanto al cuidado y la educación, a los que tiene que abandonar para asistir a largos tratamientos, a repetidos periodos de internamiento hospitalario para recuperarse de los agentes curativos o paliativos o bien, para esperar el lento y fatal desenlace de los casos avanzados, además de los altos costos que estos tratamientos representan.

Causas de muerte en edad productiva

Las principales causas de muerte en edad productiva son las enfermedades del hígado vinculadas con el alcoholismo, accidentes de tráfico de vehículos de motor, infarto al miocardio, homicidios y enfermedades respiratorias según estadísticas del Instituto de salud en el Estado de México en el rango de 15 a 64 años.

Las principales causas de muerte en niños de 5 a 14 años de edad son accidentes automovilísticos, el cáncer y en el caso específico de 15 a 24 años los homicidios seguida de los suicidios. Los sociólogos creen que el número creciente de pandillas, homicidios, suicidios, embarazos en adolescentes, deserción escolar y otros problemas son un reflejo del clima social, del cambio vertiginoso y de la desintegración de la estructura familiar y la despersonalización del individuo, y que está conectado todo esto con los medios masivos de comunicación.

Las estadísticas de mortalidad son elementos de gran importancia tanto para la configuración de las bases necesarias para la toma de decisiones durante el proceso de planeación y evaluar el impacto de los programas de salud en los niveles de bienestar de la población. Además permite eliminar resquemores derivados de la ignorancia sobre la causa y los efectos de los padecimientos crónicos más comunes pero no por ello menos peligrosos. Debido a esto es necesario el desarrollo de una cultura de la prevención, así como el autodidactismo y la información que deriva en una mejor calidad de vida y la conservación de la misma.

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