Adelgazar no es una tarea sencilla. Requiere de esfuerzo y dedicación, virtudes que muchas veces vamos perdiendo a medida que va pasando el tiempo. Y lo peor es que no siempre solemos obtener los resultados que deseamos, sobre todo cuando notamos que nos cuesta eliminar grasa de una determinada zona de nuestro cuerpo en la que tiende a acumularse sin que nosotros podamos hacer nada al respecto.
Pero no te desesperes, esto tiene una solución y es más sencilla de lo que se piensa. La clave está en consumir los alimentos adecuados que nos ayuden a reducir la grasa o que consigan que nuestro cuerpo no las almacene. Acá les dejo una lista con algunos de ellos:
Pero no te desesperes, esto tiene una solución y es más sencilla de lo que se piensa. La clave está en consumir los alimentos adecuados que nos ayuden a reducir la grasa o que consigan que nuestro cuerpo no las almacene. Acá les dejo una lista con algunos de ellos:
- Repollo: crudo o cocido, es fundamental, pues su alto contenido en vitaminas y minerales como la vitamina A, B1, B2, B6, niacina, calcio, magnesio y un largo etcétera, ayuda a que nuestro cuerpo metabolice mejor las grasas.
- Cítricos: principalmente naranjas, pues está comprobado que consiguen bajar los niveles de azúcar en la sangre además de ser unos buenos aliados en la pérdida de peso.
- Remolacha: ésta contiene altas dosis de betanina, una sustancia que mejora la actividad del riñón permitiendo así eliminar más grasa del organismo.
- Manzana: tiene efectos similares a la remolacha; aparte, contiene pectina en su cáscara, una sustancia gelatinosa que retrasa la digestión y genera una sensación de saciedad. Pero además tiene una función importante como absorber las grasas.
- Cebolla y ajo: si bien no son buenos para el aliento, si son importantes en el metabolismo del cuerpo, por su facultad para acelerarlo, evitando que las grasas se acumulen.
- Lechuga: contiene altas dosis de hierro y magnesio que ayudan a quemar grasas del organismo, además de aportarnos otra serie de nutrientes importantes para nuestro cuerpo.
- Carne: idealmente blanca, de aves preferiblemente, pues contienen menos grasa. Ojo, siempre hay que consumirlas sin piel. Si comemos carne de otro tipo es aconsejable elegir las carnes magras como la ternera, el conejo o la liebre. Y siempre es bueno no consumir salsas como mayonesa. Si queremos añadir sabor a nuestras comidas, siempre es mejor utilizar jugo de limón o mostaza, que tiene propiedades aceleradoras del metabolismo.
- Cereales: deben ser uno de los alimentos más importantes. Y la avena es una de las mejores opciones, porque es difícil de digerir por lo que la saciedad es mayor; además ayuda a reducir el colesterol.
- Condimentos: ayudan a combatir las grasas; concretamente la canela que acelera la metabolización del azúcar y baja sus niveles en sangre, y el jengibre, que acelera el funcionamiento del metabolismo
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